viernes, 14 de octubre de 2005

Hay un IG para mí

Recientemente he leído algo sobre los IG Nobel, algo así como una parodia de los premios genuinos pero que se entregan a las investigaciones más absurdas. Este año lo han ganado un tipo que creó los Castráculos, una especie de testículos de goma para perros, en diferentes tamaños y grados de firmeza; otro que estudió las presión ejercida en el interior de los pingüinos cada vez que estos sueltan un pedo; o a aquel que investigó si los humanos nadan más rápido en agua o en sirope de azúcar. Pues bien, considero que me merezco uno...
Estaba hace un par de días durmiendo. Me sonó el despertador -del móvil-. Total que, como todo español de a pie, lo cogí en la oscuridad y lo retrasé diez minutos, por aquello de disfrutar un poquillo más del calor de la cama. Pues eso, que lo restrasé. Y claro, lo volví a dejar en la mesita, en el mismo sitio. ¿El mismo? Yo diría que no. Más que nada porque me mojé la mano. Encendí la luz y allí estaba. Mi móvil. En el vaso de agua. Empapadito...
IG Nobel a Baubita por su esfuerzo, y el riesgo de quedarse sin celularrrr, en la investigación para demostrar que los móviles no flotan. Mi amiga R. lo metió en un vaso de zumo. Y tampoco nada en la naranja exprimida. Que lo sepáis...

PD: el celularrrr funciona de maravilla, conseguí resucitarlo.
PD1: este experimento ha sido realizado por especialistas -o por aleladas-. No intenten hacerlo en sus casas

3 comentarios:

Xan dijo...

Prima! Tendremos que comprarle un traje de neopreno al móvil por si, ahora que ha probado el agua, decide hacerse submarinista.

Un beso, dormilona!

Baubita dijo...

No prima, tranqui que ahora está controlado y bien controlado...

reb dijo...

genialllllllllllllll